Contrapuntos
En las instalaciones geométricas de Cecilia Ivanchevich las formas danzan movidas por la cadencia del espacio. Círculos, rectas quebradas, diagonales, extrañas figuras, líneas en fuga y estratégicos fragmentos de vacío son incorporados al pentagrama visual que, sin principio ni final, entrelazan el ritmo y marcan el tempo de las obras.
Una big band de elementos enfrentados ofician de obertura. Negro sobre blanco y blanco sobre negro instauran un contrapunto cromático que acentúa, acrecienta y amplifica las tensiones y distenciones que la artista trabaja en sus dibujos. Las líneas en fuga de las instalaciones invaden el espacio, corriendo al encuentro de las figuras condensadas en tinta. El recurso indica el compás del recorrido, anima la lectura y conduce a la próxima pieza, tanto en un sentido artístico como espacial. Bañada por una luz negra la composición se mueve en un clima impreciso, sueño y vigilia se entrechocan. Sobre un fondo de silencio que aviva la ilusión se despliegan recortes de blancos radiantes, volúmenes, formas, vacíos intersticiales. El punto álgido de la experiencia murmulla un vibrante Ah Um, al estilo de las angulosas autopistas jazzeras de Mingus.
De lo fugaz e imperceptible del trazo a la contundencia del volumen organizado en el espacio, saltando del dibujo a la instalación y viceversa, Ivanchevich concreta en esta muestra la renovación de su repertorio estético. La mezcla de rupturas gráficas, silencios musicales y trazos de lenguaje corporal expone los desvíos que una práctica artística abierta y precisa consigue entonar.
Lorena Alfonso